La fundadora de esta marca fue Florence Nightingale Graham una Canadiense que quería ser la pionera en cosméticos en Estados Unidos. Florence, más conocida como ELIZABETH ARDEN apostó por lanzar al mercado cremas y lociones con el fin de potenciar el cuidado femenino.

En 1912, abrió su primer salón de belleza en la misma y emblemática Quinta Avenida. Cuatro años más tarde, ya era la primera en el mercado, vendiendo productos especializados para el cuidado de la piel. Fue pionera en todos los tratamientos igual que en el año 1939, fue la primera en anunciarse utilizando publicidad comercial especial para proyectarla en salas de cine.

Por otro lado, fue la primera en introducir el maquillaje para los ojos de la mujer. Fue el mejor ejemplo para las mujeres ya que siempre se cuidó y no murió hasta 1966, con 88 años de edad.

Dentro de la gama de la perfumería lanzó al mercado perfumes como: “Red Door” (le dio este nombre porque así se llamaban sus salones de belleza en las ciudades más prestigiosas del mundo); “5th Avenue”; “Sunflowers”; “Green Tea”.